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Cómo mezclar Técnicas Manuales y Aparatología sin Errores en Estética Corporal.

¿Sabías que uno de los errores más comunes en los tratamientos estéticos corporales es combinar mal las técnicas manuales con la aparatología? 😱
Aunque la idea de mezclar ambas suena poderosa (y lo es 💪), si no se hace con criterio, puedes sabotear los resultados y afectar la piel o los tejidos de tus clientas.
En este artículo te explico paso a paso cómo aplicar protocolos combinados de forma correcta, qué tener en cuenta para evitar errores y cómo sacar el máximo provecho a cada sesión. ¡Vamos a hacerlo como verdaderas profesionales! 🙌

Un protocolo combinado es cuando se integran distintas técnicas y equipos en una misma sesión o plan de tratamiento, con el objetivo de mejorar y acelerar los resultados estéticos.
Ejemplo: masaje reductor + ultrasonido cavitacional + maderoterapia.

Pero ojo: no se trata de mezclar por mezclar. Hay que tener un criterio, conocer el objetivo del tratamiento, el tipo de tejido y la respuesta de la piel.

  1. Aplicar aparatología sin preparar el tejido previamente.
    👉 Resultado: baja efectividad, dolor o resistencia del tejido.
  2. No respetar el orden correcto.
    👉 Ejemplo: usar vacuum antes del masaje drenante.
  3. Usar equipos incompatibles entre sí.
    👉 Como radiofrecuencia con ciertos tipos de principios activos como los lipolíticos para la reducción de grasa que se usan en masajes.
  4. No personalizar el protocolo.
    👉 Hacer lo mismo para una clienta con flacidez que para una con grasa localizada dura. ¡Error fatal!
  5. Sobrecargar al cuerpo.
    👉 Demasiadas técnicas o aparatología en una sola sesión puede generar inflamación o estrés tisular.

Aquí te va una guía práctica:

🌀 1. Evalúa siempre el tejido.
Antes de decidir qué técnicas usar, analiza si hay grasa, retención, flacidez o fibrosis.

🧴 2. Orden lógico y funcional.
Ejemplo recomendado:

  • Inicio: masaje de apertura linfática o térmico.
  • Intermedio: aparatología (ultrasonido, radiofrecuencia, vacuum).
  • Final: técnica manual para cerrar (maderoterapia, moldeador, reductor).

🎯 3. Define el objetivo del tratamiento.
¿Reducción de medidas? ¿Tonificación? ¿Eliminar fibrosis? No todos los protocolos sirven para todo.

🕒 4. Menos es más.
Mejor dos técnicas bien aplicadas que cinco sin control. El cuerpo necesita procesar cada estímulo.

📋 5. Crea fichas personalizadas.
Lleva un registro de qué combinaciones, funcionan mejor según el tipo de cuerpo y evolución.

  1. Postquirúrgico (después de la 4ta semana):
    • Drenaje linfático suave
    • Ultrasonido
    • Radiofrecuencia
    • Moldeador
  2. Reductor en abdomen con grasa localizada:
    • Masaje térmico o gommage
    • Cavitación
    • Vacuum + maderoterapia
    • Masaje reductor manual
  3. Flacidez en brazos o piernas:
    • Masaje activador
    • Radiofrecuencia
    • Técnica moldeadora con drenaje profundo y con vendas frías
  • Capacítate siempre: los aparatos evolucionan y cada marca tiene protocolos diferentes.
  • Menos show, más resultados: lo importante es que el cuerpo entienda lo que estás haciendo, no impresionar a la clienta con mil técnicas al tiempo.
  • No copies protocolos de redes: adáptalos a tu conocimiento y al estado del cuerpo.
  • Combina con lógica, no por moda. 😉

👉 Si te gustó este artículo, compártelo con otras colegas o guárdalo para tenerlo a mano cuando armes tus protocolos.
¿Te gustaría que subiera ejemplos detallados por tipo de cuerpo o condición estética? ¡Déjamelo saber en los comentarios!
Y si eres esteticista en formación, recuerda que en este blog Luma Estetic encuentras más contenido exclusivo para ti. 💖

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